Aquí les narraré nuestro viaje durante la expedición ESPER 2008 al área más bella de todo el Titicaca, Justamente la que está frente a la ciudad de Puno, cruzando al otro lado del lago. En mis viajes he tenido la oportunidad de dar toda la vuelta al lago, tanto por Perú como por Bolivia. Aquí les muestro un mapa donde me permito colocar con línea roja los sectores que considero más bellos del lago Titicaca. Sin embargo, el área con línea fucsia es la que considero tiene los más increíbles paisajes, bahías y playas de todo el Lago. Por ahí pasamos rumbo a nuestros puntos de buceo de los cuales hablamos más abajo. La temporada de lluvia aún no empezaba por lo que el paisaje aparece algo amarillento. Para marzo y abril todo estará lleno de flores.
Para esta parte de la expedición llego una de mis alumnas de 3er año, Nelly Mostajo, quien, además de buzo junior, ya está trabajando en aspectos moleculares de las esponjas.
El viaje nos dijeron sería de 3 horas... pero el paisaje fue tan impresionante que lo hicimos en 7 horas. Estaban por empezar las lluvias y las nubes intensas daban dramatismo al lago.
Los pastos amarillentos empezaban a ser bañados por las primeras lluvias de la temporada y los agricultores agradecían a los Apus el envío, aunque tardío, de las lluvias que evitarían las heladas y llenarían de vida sus cultivos de papa que hace más de 6 mil años fueron domesticadas por primera vez a orillas del lago sagrado.
Las bahías están por doquier enmarañando el litoral de este lado desconocido del lago, en pocos lugares se respira tanta paz y armonía como a orillas del Titicaca.
Que es una maravilla, no hay duda, tal vez por eso, por su belleza y misterio es que nacen tantas leyendas quechuas y aymaras que lo rodean. La cantidad de gente a sus orillas es escaza, la naturaleza lo toma todo.
Nuestro objetivo principal es la Isla Suasi, donde nuestra amiga Martha Giraldo, dueña de la isla, amablemente nos presto su casa. Aquí solo está la casa de Martha y un magnifico hotel de la cadena Casa Andina.
La isla Suasi es uno de los ambientes lacustres menos alterados pues al no haber población la vegetación y fauna nativa se desarrolla sin presiones.
Entre vizcachas, vicuñas, íchu de más de 1 metro, cantutas, arboles de queñuas y colles está el hotel Casa Andina, con una arquitectura rústica maravillosa y que funciona 100% con energía solar. Un ejemplo de turismo ambiental. Los amigos del Hotel nos brindaron todo su apoyo logístico para los traslados de los equipos y para las operaciones de buceo, gracias!
Las condiciones para el buceo también fueron muy buenas. Nelly buceo poco pues lamentablemente tuvo problemas auditivos que no le permitieron bajar más de 3 metros. Philippe estaba feliz en el Titicaca pues podía usar su gran cámara fotográfica que por el volumen es difícil de usar en el mar.
Nelly colectando sus esponjitas para ser analizadas en los laboratorios de genetica de la UPCH.
La magnífica vegetación sumergida de la zona mostraba paisajes que parecían creados dentro de un acuario gigantesco.
La vegetación nos permitió buscar y observar a las esponjas en un hábitat diferente. Fueron especialmente abundantes en las totoras.
... y también muy abundantes en las rocas poco profundas donde se observan espléndidos paisajes coloreados por las esponjas.
La profundidad de la zona nos permitió bucear hasta los 25 m, donde el agua permanecía muy clara pero el sedimento del fondo se levantaba al menor contacto reduciendo la visibilidad a cero por lo que había que bucear con mucho cuidado. La fotografía siguiente es a 12 m de profundidad.
A partir de los 15 metros ya no encontramos esponjas pero a los 25 m metros reaparecieron en gran número, todas de color blanco amarillento. Es probable que se trate de las mismas esponjas que las de aguas poco profundas pero que, por la profundidad, no tienen chlorelas simbiontes. Lo mismo encontramos en cuevas poco profundas donde las esponjas que crecen en oscuridad también son amarillentas... o serán otra especie??, la única forma de saberlo es con análisis de laboratorio!! ya veremos luego.
El lugar de buceo elegido fue un islote frente a Sucuni y la elección fue la correcta pues la trasparencia era excepcional y con la mayor abundancia de esponjas. Además aquí observamos las más grandes y con mayor diversidad de formas que podíamos esperar.
El buceo lo disfrutamos todo lo que pudimos pues sería el último en el Titicaca durante la expedición. Después de un percance con el motor del bote que nos tuvo varados en un totoral por más de una hora, salimos del lugar al anochecer.
Nuestra preocupación era, al llegar a la playa frente a Suasi, como haríamos para ir a la isla!, pero, inesperadamente, el fiel amigo Isidro nos esperaba por horas a que llegáramos.
Por la mañana, los amigos trabajadores del hotel nos ayudaron a trasladar nuestros 600 kg de equipajes hasta la camioneta, tras lo cual nos dimos una emotiva despedida.
Despues de nuestra última noche en una isla de ensueños, regresamos melancólicos a Puno para la quesería la última aventura en las alturas de los andes del ESPER 2008: El primer buceo científico registrado en la laguna Umayo.
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La profundidad de la zona nos permitió bucear hasta los 25 m, donde el agua permanecía muy clara pero el sedimento del fondo se levantaba al menor contacto reduciendo la visibilidad a cero por lo que había que bucear con mucho cuidado. La fotografía siguiente es a 12 m de profundidad. A partir de los 15 metros ya no encontramos esponjas pero a los 25 m metros reaparecieron en gran número, todas de color blanco amarillento. Es probable que se trate de las mismas esponjas que las de aguas poco profundas pero que, por la profundidad, no tienen chlorelas simbiontes. Lo mismo encontramos en cuevas poco profundas donde las esponjas que crecen en oscuridad también son amarillentas... o serán otra especie??, la única forma de saberlo es con análisis de laboratorio!! ya veremos luego. Otro lugar muy bello donde fuimos a bucear fue en las bahías de la zona de Sucuni. Esta es una increíble formación geológica donde, dentro de una gran bahía, existen numerosas pequeñas bahías y ensenadas. El área es el límite de la frontera entre Perú, poco más allá es Bolivia.
El lugar de buceo elegido fue un islote frente a Sucuni y la elección fue la correcta pues la trasparencia era excepcional y con la mayor abundancia de esponjas. Además aquí observamos las más grandes y con mayor diversidad de formas que podíamos esperar.El buceo lo disfrutamos todo lo que pudimos pues sería el último en el Titicaca durante la expedición. Después de un percance con el motor del bote que nos tuvo varados en un totoral por más de una hora, salimos del lugar al anochecer.Nuestra preocupación era, al llegar a la playa frente a Suasi, como haríamos para ir a la isla!, pero, inesperadamente, el fiel amigo Isidro nos esperaba por horas a que llegáramos. Por la mañana, los amigos trabajadores del hotel nos ayudaron a trasladar nuestros 600 kg de equipajes hasta la camioneta, tras lo cual nos dimos una emotiva despedida.Despues de nuestra última noche en una isla de ensueños, regresamos melancólicos a Puno para la quesería la última aventura en las alturas de los andes del ESPER 2008: El primer buceo científico registrado en la laguna Umayo.Numero de visitas:
